8.23.2004

Es todo tan maravilloso...

Este sábado nenita-A libró todo el día, raro es tratándose de la empresa para la que trabaja, así que cogimos el petate y nos fuimos de merendola por ahí, concretamente a los jardines de Lourizán, a propuesta mía, que estaban preciosos, pues con las lluvias caídas últimamente había agua suficiente como para que se viera la cascada de la cueva, incluso había ranas y todo... fue ultrarrelajante, al menos para mi, que es que a mi la naturaleza me deja en éxtasis.

Pues nos pasamos toda la tarde allí, jugando a las cartas, que es otro juego que no se me da nada bien, junto con el parchís, el ajedrez... salvo el trivial, al que nadie quiere jugar conmigo... snif... en fin, que asumiendo los riesgos de que cualquier catástrofe o incidente que surgiera sería enteramente responsabilidad mía, nos fuimos allá... y nos lo pasamos genial, y no pasó ningún incidente salientable, solo que nenita-B se cargó una seta que acababa de nacer o florecer (que no sé lo que hacen las setas)...

De vuelta a la ciudad de Cangas, y tras la frustrada intentona de quedar conmigo de Ex, me fui con Erea a por ahí de juerga, concretamente al Argolide a tomar un helado de fresa y limón... mmmmmm... increíblemente había sitio a las 12 y pico de la noche... cuando de repente apareció nenita-B con toda la superpandi, bueno, parte de la superpandi... después fuimos todos (todos) al K2, que es un sitio que yo no soporto y que me pone los pelos de punta porque no tiene mesas, a no ser que seas un afortunado de la vida y un bendecido por los cielos, y claramente nosotros no lo somos, así que nos tuvimos que conformar con esa especie de percheros con bandejas a modo de mesita muy chunga con sillas incómodas que no me gusta nada...

Después de esto fuimos al Boxes a mover el esqueleto, y no tuvimos la suerte de que cambiaran de dj, por lo que siguen poniendo esa música horrible e histriónica que me repatea los hígadillos pero que es lo que hay... en fin... pero me lo pasé genial mientras la petarda que estaba detrás de mi no paraba de tocarme y golpearme no sé hasta que punto involuntariamente... fue tan maravilloso...

Mientras volviamos para casa, decidimos que el mejor camino era el paseo marítimo, aunque hacía un fresquito guapo, cosa que no le importaba demasiado a la pareja que estaba en la playa dando rienda suelta a su pasión, tal vez fruto de los excesos del botellón cuyos restos aún se podían observar en el moviliario playero... pero centrémonos en esa pareja (heterosexual) que no podía parar de... vamos... eso como conejos... que poca vergüenza... en fin...

El domingo trate de ver por enésima vez Aladdin, pero me quedé dormido, y dormí toda la tarde, así que no hice nada...

Hoy lunes queda menos para mi cumpleaños, y como viene siendo tradición me pongo más huraño con la gente, provocado por la tesitura de celebrar mi vigésimo primer cumpleaños con tres personas, a lo sumo seis... lo cual es muy triste... por lo que, como también es tradición, hay algunas que me organizan el día, eso sí, sin tan siquiera saber lo que pienso, entonces me veo que el día que tenía pensado hacer algo para mí y para mis amigas me encuentro que también se apuntan las amigas de mis amigas, por las cuales no siento especial devoción... no te lo tomes a mal querida, pero con verte una vez al año ya me llega... Pero esto no es lo mejor, lo mejor es que yo aún no lo sé, por lo que tengo que interpretar mi logrado papel de idiota que no se entera de nada y que se entera lo suficientemente tarde como para encontrar un remedio a situaciones embarazosas en las cuales me pongo huraño con la gente...

Por todo esto este post se titula así, por que en realidad es todo tan maravilloso...


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